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The Legend Of Zelda Twilight Princess 2 por Twilight

 
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R4ml
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Registrado: 12 Sep 2007
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MensajePublicado: Sab Abr 11, 2009 10:38 am    T�tulo del mensaje: The Legend Of Zelda Twilight Princess 2 por Twilight Responder citando

Cap�tulo I. Recuerdos que duelen



Abri� los ojos cuidadosamente, la luz del sol le cegaba. Otra vez. Desde hacia dos meses �otra vez� se hab�a despertado en el mismo sitio, en su casa situada en el gran �rbol al lado de Ordon y al lado de su peque�o lugar de entrenamiento de arco y tirachinas. Dentro de un rato tendr�a que levantarse y llamar a Epona (que seguramente estar�a por los alrededores), ten�a que ir al pueblo para ayudar a meter las cabras en el establo. Las dichosas cabras nunca se met�an por si mismas, siempre era lo mismo. Dos meses antes no habr�a tenido que hacer eso, en realidad no hubiera tenido ni que levantarse siquiera, porque directamente no dorm�a, no descansaba. Se pasaba noche y d�a despierto para no perder ning�n segundo y salvar a Hyrule y al Crep�sculo de un terrible futuro por parte de Ganondorf. En ese momento hab�a varias cosas e ideas pasando por su cabeza que le ayudaban a no rendirse sin m�s: �Si destruyo a Ganondorf, todos viviremos juntos y en paz�, �Soy el elegido, este es mi destino�, �Cuando derrote a Ganondorf, Midna estar� feliz y reinara en el otro mundo�, �No puedo echarme atr�s, Hyrule conf�a en mi, si me echo atr�s ya no habr� esperanzas y Midna no resistir� mucho sin mi ayuda. No voy a permitir eso jam�s�. Todas esas palabras que hac�a dos meses pasaban por su cabeza, seguramente hab�an sido las causantes de que Link no hubiera abandonado. Bueno, quiz�s no eran las �nicas causantes. Link no estaba todo el tiempo solo. Midna estaba con el en todos los sitios, porque para encontrar La Sombra Fundida hab�a necesitado la ayuda de Link. Por ese motivo al principio Midna solamente utilizaba a Link para sus intereses y se aprovechaba de el. Todo cambi� cuando en el Templo Zora apareci� Zant para robarles a Link y Midna las reci�n adquiridas partes de La Sombra Fundida. Us� sus poderes para convertir a Link en lobo y debilitar en gran parte a Midna. Zant pens� aprovechar la ocasi�n para, aparte de robar la legendaria armadura, quitarle la vida a su hermana y as� impedir que restauraran el espejo de alguna forma. Por alguna curiosa raz�n, cuando Zant le lanzo la bola de energ�a oscura a Midna para acabar con ella, Link, convertido en lobo y haciendo uso de sus pocas fuerzas, corri� hacia Midna y se puso entre ella y la bola para detener su trayectoria. No sab�a porque, simplemente no iba a permitir que a Midna le ocurriera nada malo. Por eso le di� el impulso de salvarla, de protegerla. Por ese motivo, Midna hab�a dejado de tratarle como a basura y hab�a pasado a tratarle como a un amigo o a alguien que apreciaba por lo menos un poco. Esto hab�a mejorado un poco los �nimos de Link: Ya no estaba con alguien que viajaba con el por inter�s. Para rematar, cuando salvaron (m�s o menos) Hyrule y fuero hacia el desierto Gerudo, Midna en vez de �chantajearle� para que accediera a ayudarla a encontrar los trozos del espejo crepuscular, le pidi� por favor que la ayudara y solamente si el quer�a. Por supuesto, el asinti� sin pens�rselo dos veces.

Se frot� los ojos. Todav�a estaba adormilado, por eso le ven�an todos esos recuerdos. Solo eran de hace dos meses, pero parec�an tan lejanos� Ahora le estaba viniendo a la cabeza su �ltima lucha con Ganondorf.



Flashback



Ya llevaban tiempo en el castillo. Link y Midna hab�an entrado gracias a la ayuda de la sombra fundida. Eso tambi�n hab�a servido para que Link se diera cuenta de que la armadura era muy peligrosa. Midna hab�a quedado inconsciente de agotamiento cuando la hab�a usado y Link hab�a tenido que cogerla en brazos para que no se cayera. Ahora Link estaba frente a Ganondorf, el cual estaba montado en su caballo agitando el trozo de armadura fundida que Midna sol�a llevar en su cabeza. Midna acababa de usar la sombra fundida para matar a Ganondorf. Link hab�a intentado evitarlo para que no la ocurriera nada, pero ella les hab�a teletransportado a el y a Zelda fuera del castillo para que no sufrieran da�os. Link no pudo hacer nada y para colmo, Midna hab�a desaparecido, o lo que era lo mismo, hab�a muerto. Link evitaba pensar esta ultima posibilidad, solo de pensarlo se pon�a enfermo. Ganondorf soltaba una carcajada. Con la ayuda de Zelda (que hab�a lanzado flechas de luz a Ganondorf) consiguieron debilitarlo en gran parte, as� Link pudo enfrentarse a el. Estaba enormemente nervioso cuando luchaba contra el, al fin y al cabo, no todos los d�as se luchaba con el hombre mas poderoso del mundo, de los mundos. Con alguien que incluso superaba a Zant con creces. Hab�a muchas razones para que Link se armara de valor para matarle:

Primera: Salvar�a Hirule y el Reino del Crep�sculo.

Segundo: Vengar�a la muerte todas las vidas inocentes que hab�an pasado por el filo de la espada de Ganondorf.

Tercera y �ltima: Hab�a matado a Midna, hab�a matado a su compa�era.

Personalmente cuando luchaba evitaba pensar en la ultima raz�n: se le iba la cabeza y descargaba su furia contra Ganondorf, eso evitaba que luchara bien y con tranquilidad. Finalmente le venci� clav�ndole la espada en el hondo del vientre, cuando yac�a en el suelo. Momentos despu�s, aparecieron los esp�ritus de Hyrule para felicitarle, y de paso concederle un peque�o regalo. Una figura de mujer agachada se iba levantando poco a poco del suelo. Mientras se levantaba, Link no tard� en reconocerla, y sin pensarlo, se hab�a lanzado a toda velocidad hacia ella. Cuando ella se levant� y le miro con una sonrisa diciendo ��Qu� pasa?, �Soy tan bella que no tienes palabras para describirme?� sinti� que la alegr�a le consum�a por dentro. Lo malo lleg� despu�s. Algo en lo que, afortunadamente, Link no se hab�a parado a pensar. Todo estaba en calma y Midna ten�a que reinar el reino del crep�sculo, es decir, ten�a que irse. Despu�s de despedirse de Zelda y colocarse en medio del espejo, se dirigi� a Link y le dijo �Link� Volveremos a vernos��. Link que a�n no hab�a asumido el significado de la situaci�n por completo, solo pudo dirigir la vista intensamente hacia Midna, o hacia donde ella estaba, porque segundos despu�s, desapareci�.



Fin Flashback



Agit� la cabeza hacia los lados. No era hora de ponerse a pensar en eso. Todo hab�a pasado ya, el segu�a con su vida de siempre y todo estaba en su sitio. Mejor era olvidar esos recuerdos y seguir adelante como si nada de eso hubiera pasado, es decir, en paz.

-�Link!, �Link baja ya, es hora de que vayas al pueblo, las cabras no quieren meterse en el establo!

Link asom� la cabeza por la ventana. Eran Iv�n e Ilia que ven�an a avisarle, como siempre. Asinti� con la cabeza y baj� las escaleras para salir de casa. Una vez fuera se dirigi� al pueblo mientras escuchaba lo que Ilia e Iv�n le iban contando.

-Link, dice mi padre que tiene que hablar contigo. Creo que quiere que lleves provisiones al Castillo de La Ciudadela, al de princesa Zelda.

Link asinti� de nuevo. Cuando acabara con las cabras ir�a a hablar con el alcalde. Desde que hab�a destruido a Ganondorf, se hab�a convertido (supuestamente) en un �hombre� como dec�a el alcalde. Le mandaban llevar comida, v�veres y cosas al castillo. Siempre se paraba un poco a hablar con Zelda. Lo que no le gustaba era cuando sacaba temas tipo: �Que pena que Midna no este aqu�, le gustar�a esto� y cosas que tuvieran que ver con su haza�a. No quer�a hablar de eso. Seguramente ser�a otra misi�n de esas.



*****

-Link, tienes que llevar el nuevo cargamento de le�a que a tra�do el padre de Iv�n al castillo. Supongo que con Epona no tendr�s problemas�

-Ning�n problema. El d�a se pasar� r�pido, ma�ana estar� de vuelta con Epona.

-Perfecto. �Ah, se me olvidaba! Zelda dice que quiere decirte algo importante.

-�Importante?

-Si. Dice que ah averiguado algo de un espejo o algo as�.

-�De un espejo?-Ahora si que estaba sobresaltado. �Qu� pasaba con el espejo?-.

-No creo que sea de mucha importancia. Bueno, que te vaya bien el viaje chico. Ya sabes, aunque ahora no haya enemigos, nunca bajes la guardia.

-Si, tendr� cuidado�

Link sali� apresuradamente de la peque�a casa. Fue hacia el peque�o lago donde Ilia estaba acariciando a Epona y se subi� a ella. Se despidi� de Ilia apresuradamente y sin prestarle mucha atenci�n, seguramente no era nada, pero era lo mismo. Cualquier cosa relacionada con el espejo era de suma importancia para el. Ten�a much�simas ganas de llegar a la Ciudadela.
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MensajePublicado: Sab Abr 18, 2009 11:25 am    T�tulo del mensaje: Responder citando

Cap�tulo II. Grey



Epona ya llevaba cabalgando desde hacia horas. La noche estaba al caer, pero Link no se paraba a descansar, quer�a ir a La Ciudadela lo m�s r�pidamente posible. Ya estaban al lado de la ciudad, estaban cerca del puente a la entrada de la misma. Como en la ciudad no pod�a entrar con Epona, Link la dejo por los pastos de alrededor.

-Esp�rame hasta que vuelva�

Dijo Link mientras acariciaba su lomo. Pero luego reflexiono. Era muy poco probable� pero si ten�a que hacer alguna misi�n ordenada por Zelda tardar�a bastante m�s, as� que decidi� dejar las cosas de otra manera.

-Escucha Epona, ya ha anochecido, esta noche me quedare en La Ciudadela. Si ma�ana al atardecer no estoy aqu�, quiero que vayas a Ordon para que te cuiden all� Iv�n, Ilia, Talo y los dem�s� �de acuerdo?

Epona dio un bufido y se acerc� a los pastos de un �rbol para echarse a reposar y comer un poco. Mientras Link pasaba a toda velocidad por el puente y entraba en la ciudad. Pas� por todas las calles hasta llegar a las puertas del castillo. Cruzo los prados y entr� en el castillo, en la torre principal, en el asiento de Zelda. All� estaba Zelda con sus dos guardias al lado. Tan tranquila y serena como siempre.

-Pasa, Link.

Link se acerco hasta situarse enfrente.

-Pod�is retiraros-anunci� Zelda a sus guardias. Estos, obedientes, salieron al instante de la sala-.

-Aqu� traigo el cargamento de le�a. Yo y Epona la hemos tra�do sin ning�n rasgu�o.

-Muy bien. Siento darte tanto trabajo, Link. La Ciudadela es grande, al igual que sus habitantes y necesitan recursos.

-Claro� por cierto, me dijeron que ten�as algo que contarme sobre el espejo. El del Crep�sculo.

Link intento disimular su impaciencia.

-Cierto.Ver�s, �te acuerdas de Telma? La que tiene una peque�a tasca en la ciudad.

Como para no acordarse. Una vez (con ayuda del gato de la tasca) el y Midna se hab�an colado intentando no asustar a la gente.

-�Claro que me acuerdo! Llev� a Kakariko al ni�o Zora con mi ayuda para curarlo y ayudo a que Ilia recuperara la memoria, bueno, la cuido un tiempo.

-Telma tiene un amigo. Un chaval que siempre esta en el bar. El caso es que ese chico siempre tiene una especie de �visiones� muy acertadas. Ayer Telma vino al castillo para anunciarme que ese chico llamado Grey hab�a tenido una visi�n relacionada con un espejo muy extra�o�se supone que si pasa algo sospechoso, como en este caso, los aldeanos tienen permiso para entrar en el castillo y verme en persona. Por eso vino ayer Telma. Adem�s, a mi no me preocupa. Aunque no lo creas salgo a la ciudad frecuentemente y conozco a muchas personas de La Ciudadela, aunque esa es otra historia. Por supuesto, no le conte nada del espejo a Telma, ese asunto no lo saben los ciudadanos, y no tengo intenci�n de que lo hagan. El asunto es que quiero que vayas cuanto antes a la Tasca. As� podr�s decirle a Telma, o al chico en persona, que te cuente esa extra�a visi�n. Estoy segura de que esta relacionada con el espejo Crepuscular. Te la contar�a yo� pero prefiero que vayas, a ver si tienes suerte y te encuentras a Grey all�.

-Si, princesa. Ir� ahora mismo.

-Ya que es de noche, si quieres, puedes quedarte a descansar en los aposentos del castillo.

-No, gracias. Necesito saber esa informaci�n cuanto antes�

-Lo entiendo. Entiendo que est�s preocupado. Te intentar�a tranquilizar diciendo que no es nada malo� pero no estoy segura de nada, ya lo sabremos.



*****

-Hola� buenas noches.

Telma se gir� para ver al reci�n llegado. Un llegado algo inesperado.

-�Link! Hace unos pocos meses que no te veo, estas bien, �eh chaval?

-Si, bueno, mas o menos. Yo�

-Supongo que habr�s venido por lo que le cont� a Zelda� �Cierto?

-Si. Me interesa ese asunto por� solamente por saber si puede llegar a algo m�s que una visi�n o premonici�n.

-Aun no lo se con exactitud� pobrecito, has venido aqu� sin descansar por una visi�n�

-No te preocupes, tambi�n tuve que transportar recursos para la ciudad, como le�a.

-Bueno, si buscas a Grey, casualmente hoy no esta. Pero yo puedo contarte la visi�n.

-Vaya, es una lastima� Pero cu�ntamelo todo, por favor.

-Claro. Veras� Grey me cont� hace tres d�as uno de sus sue�os, era como una de sus habituales visiones. En ella vio trozos de espejo rotos y a continuaci�n un espejo normal. Despu�s ve�a un mundo extra�o donde sal�a un hombre de pelo negro corto y piel azulada, vest�a de negro� no era un Zora, por lo menos su aspecto era humano. Y a continuaci�n vio como un hombre, vestido con ropajes negros mataba a una muchacha de piel igual de azulada y cabellos anaranjados, casi rojizos. Le clav� una espada. Como las visiones de Grey son siempre acertadas, acud� al castillo a informar a la princesa. Naturalmente, nadie que yo sepa conoce a esa joven, pero si su visi�n es acertada� dudo que le quede mucho tiempo de vida a la pobrecita. Ahora que inform� a su majestad y a ti, podr�amos intentar encontrarla para protegerla de ese suceso y evitarlo, al fin y al cabo, es una vida inocente� Link� �Link? �Estas bien?

Link hab�a palidecido al escuchar aquello. No se iba a parar a pensar si eso pod�a ser verdad o mentira, seguramente lo primero. Adem�s, ya se estaba imaginando quien ser�a la muchacha de cabellos anaranjados y piel azulada� con un poco de suerte, era otra mujer, pero no iba a pararse a averiguarlo. No ten�a tiempo que perder, ya ten�a una peque�a pista, el espejo, los fragmentos. Midna hab�a destruido el espejo, sin embargo, ten�a que encontrar alguna forma de llegar al Crep�sculo o a donde ella estuviera� Buscar los fragmentos no era razonable, porque estaban destruidos. Lo unico que se le ocurr�a era buscar ayuda, buscar�a al tal Grey.

-Telma� �D�nde puedo encontrar a Grey?

-Pues�

La puerta del bar se abri�. La luz de la estancia ilumino a un curioso joven de pelo rubio, bien peinado y ojos� rojos. Extra�o, pero cierto. Unos ojos rojos del color de la sangre. Llevaba tapada la boca por una manta negra, se acerco a la barra silenciosamente y se sent�. Link no le presto atenci�n hasta que Telma le dijo qui�n era. Efectivamente, ah� estaba el tan nombrado Grey, y a Link se le ocurrieron un mill�n de preguntas que hacerle, de las cuales, se prometi� que solo har�a las necesarias.

-Hola, soy Link. Vengo de Ordon, un pueblo de la regi�n de Farone.

-�Link es uno de los caballeros preferidos de Zelda, Grey! �Y yo le ayud� con una amiga, y el me escolto a Kakariko para salvar al ni�o Zora del que toda la gente hablaba en La Ciudadela!

Anunci� Telma al reci�n llegado con orgullo.

-Vaya� es un placer. Me llamo Grey.

-Yo soy Link. Vine hasta aqu� porque me han dicho lo de tu visi�n y me interesa.

-�Por algo en concreto?

Solo acababa de conocerlo, pero aun as�, Link no tardo en advertir un sentimiento de advertencia hacia Grey. De momento parec�a que el chico pensaba con rapidez y algo de astucia, o eso parec�a.

-Si, bueno� por cosas personales.

-Entiendo. Lo �nico que puedo decirte es lo que seguramente ya te ah contado Telma.

-Ya� entiendo.

Link estaba furioso. All� no encontrar�a absolutamente nada que pudiera servirle de ayuda, y, desde luego, no se quedar�a de brazos cruzados mientras posiblemente, alguien planeaba matar a Midna, porque casi seguro que esa mujer era Midna. Si en esa Tasca no hubiera nadie y estuviera el solo, le habr�a dado una patada a una de las sillas que estaban por all�, pero tuvo que contenerse. Decidi� que lo mejor ser�a salir de all� y no perder m�s el tiempo. De alguna forma encontrar�a algo� o eso esperaba, pero desde luego, no encontrar�a nada en la Tasca.

-Bueno, tengo que irme. Supongo que llegar� tarde a Ordon y no ma�ana al anochecer como yo hab�a previsto. Necesito encontrar alguna pista en alg�n lugar de Hyrule, me lo recorrer� entero las veces que haga falta, pero necesito algo�-dijo Link ensimismado-.

-Perdona, pero� �tan importante es eso para ti?-Pregunto Grey con su semblante siempre apacible y tranquilo-.

Link no sab�a exactamente que significaba �eso�, pero no le hizo falta pensar mucho para responder a esa pregunta.

-No sabes cuanto. En serio, no sabes cuanto�

Link se despidi� de Telma y Grey y sali� de las Tasca. Como de costumbre, no ten�a muy controlada la hora, pero deb�a de ser tard�simo. Lo mejor por ahora ser�a descansar en los aposentos del castillo tranquilamente, as� pensar�a con claridad. Mientras estaba sumido en sus pensamientos una mano se pos� en su hombro. Link se sobresalto. Era Grey.

-Antes ment� sobre una cosa. Se m�s informaci�n, y muy valiosa. Ven a la esquina del callej�n que te la cuento.

Link le sigui� sin decir nada. Una vez en el callej�n Grey empez� a hablar.

-Se que ese era el espejo del Crep�sculo.

Link se quedo de piedra. �Pero como pod�a�? No, imposible�

-�C�mo�?

-Perdona, no puedo decirte como lo se. Espero que no te moleste, pero si quieres la informaci�n te la doy, y si no, pues me largo.

�Qu� mas daba como? �Ya ten�a informaci�n y no iba a dejar pasar la oportunidad!

-Si, cu�ntalo por favor.

-Efectivamente. La princesa del crep�sculo era esa mujer.

Los peores temores de Link se confirmaron. Aun as�, no dijo nada.

-Pero eso se puede evitar, si es lo que te interesa. Veras� conozco un mecanismo de viajar hasta el mundo del crep�sculo. Como la premonici�n es en ese mundo, solo tendr�as que traerla hasta este y encargarte de alguna forma de su asesino. Te contar� ese mecanismo� En el castillo de Zelda en una sala secreta hay un aparato que permite viajar entre dimensiones. Supongo que por alg�n motivo su alteza lo oculta. Pero puedes usarlo si quieres.

-�Por qu� me cuentas esto?

-No preguntes. Solo aprovecha lo que te queda.

Grey se alej� por la oscura calle, taqn misteriosamente como hab�a venido. Link ya entendi� todo: Zelda no hab�a querido cont�rselo porque supon�a que Link le har�a preguntas al respecto y decidi� mandarle a la Tasca porque pensaba que Grey se callar�a la informaci�n. O quiz�s pensaba que el no lo sab�a� bueno, tambi�n cab�a la posibilidad de que fuera una trola. Link se desperez�. Esa noche ya no iba a dormir.
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MensajePublicado: Mar Abr 21, 2009 8:22 pm    T�tulo del mensaje: Responder citando

Capitulo III. Los H�roes Mueren



Link acababa de entrar de nuevo en la gran sala del castillo, donde Zelda reposaba en su trono. No le pedir�a explicaciones, solo quer�a saber donde estaba ese aparato (si es que en verdad exist�a), pero por si acaso, mejor hablar directo y sin rodeos.

-Hola princesa.

-Hola Link� �Conseguiste hablar con Grey? �O con Telma?

-Un poco de todo-respondi� vacilante-pero me entere de una cosa bastante interesante.

-Ah� �En serio?-Pregunt� Zelda. No parec�a una pregunta, m�s bien era un lamento ahogado-.

-Si. Se que no deber�a decir esto princesa� pero creo que sabes perfectamente de que hablo.

Zelda simul� sorprenderse, pero pronto cambi� la cara consciente de que Link no se retractar�a en sus palabras. Por otra parte, Link estaba seguro y no seguro al mismo tiempo de lo que estaba diciendo. Podr�a ser mentira la informaci�n, pero, �para qu� querr�a Grey mentirle? Adem�s no pod�a ser mentira, Grey hab�a dicho que conoc�a el espejo del Crep�sculo y tambi�n a Midna. Eso es, eso era verdad, por tanto no pod�a haberle mentido. Link se alegr� de tener una base resistente en su pensamiento que aprobara que Grey no hab�a mentido, mas que nada, porque era la �nica forma que ten�a de salvar a Midna. Ahora miraba cada vez a Zelda m�s confiado de lo que estaba diciendo. Finalmente, Zelda pareci� darse por vencida. Ya no se pod�a ocultar nada.

-Siento no haberte dicho lo de esa sala.

-No importa. Tampoco me importan las razones que tuvieras para esconderla, solo quiero saber en que parte del castillo se sit�a. Lo m�s pronto posible si puede ser.

-Veras� te oculte esa sala por una raz�n.

-Lo siento princesa� pero ya te he dicho que da igual la raz�n, ll�vame y ya esta.

-Por favor d�jame contarte el motivo, despu�s tu decidir�s si aun quieres ir o no.

Link pens� que Zelda estaba desvariando. Nada le har�a cambiar de parecer. Absolutamente anda.

-Mi respuesta ser� la misma. Pero cu�ntame lo que quieras.

-Haber� �recuerdas por que se fue Midna?

-Si, porque ten�a que gobernar su reino.

-�Y recuerdas porque rompi� el espejo?

-Porque� porque si el espejo permanec�a intacto, los seres de las sombras podr�an viajar a este reino y podr�a generarse caos como paso con Ganondorf.

-Exacto. Te lo voy a explicar. Esa sala secreta contiene un artilugio que es capaz de tele transportar al que lo usa a lugares en los que el usuario haya estado con dicho artilugio, es como si los grabara en su memoria. Pero no solo eso. Tambi�n es capaz de llevar a lugares en los que hayas estado. Solo tienes que coger el aparato y concentrarte en la imagen de ese lugar. Aunque no hayas estado all� con el, ser� como si ya lo hubiera grabado en la especie de memoria.

-Entiendo. Pero aun no entiendo que tiene esto de malo�

-Como t� has dicho con el espejo, si alguien se percatara de que existe una conexi�n entre este mundo y el otro podr�a usarlo con buenas intenciones, pero tambi�n con malas. Si alguien similar a Ganondorf se percatara de eso� �Qu� crees que ocurrir�a?, Ahora ya sabes porque esta escondido en una sala secreta del castillo.

Link asimil� toda la informaci�n pero no se lo cre�a. �Iban a dejar que Midna muriera solamente por el hecho de que hubiera paz en Hyrule? �Jam�s! El siempre hab�a sido obediente y hab�a echo todo lo que le mandaban, pero despu�s de conocer a Midna su pensamiento hab�a cambiado un poco.

-Y vamos a dejar que Midna muera� �Para que Hyrule este en paz?

Pregunt� Link incr�dulo.

-Escucha Link� Aunque maten a Midna, el crep�sculo estar� en paz porque solo la mataran para ser el sucesor del trono, nada m�s. Y en cuanto a Hyrule, tampoco pasar� nada. �Enti�ndelo Link! �Midna es una vida, pero si pasara eso, podr�an perderse miles, e incluso millones de vidas inocentes! �Quieres que eso pase?

Link no contest� de inmediato. Nunca hab�a sentido odio ni nada que se le asemejase hacia Zelda, pero ahora lo estaba sintiendo. Zelda le parec�a ahora la persona m�s ego�sta del mundo.

-�Y te crees que voy a dejar que la maten� por esa estupidez? �Por esa idea tan ego�sta? Solo porque alguien podr�a intentar crear caos� �voy a dejar morir a Midna?

-�Link enti�ndelo!, �Compara una vida con miles!

-�Compara t� tu gran ego�smo con la humildad que tuvo Midna al decidir que en la ultima batalla te ayudar�a hasta el punto de morir! �Si los esp�ritus no la hubieran resucitado, hubiera muerto por ayudar Hyrule1 �Incluso yo intent� imped�rselo, pero no me dejo! �Comp�ralo!

Link nunca hab�a discutido con nadie, mucho menos con la princesa Zelda. Pero estaba estallando. La �ltima frase la hab�a dicho gritando e hist�rico. Zelda iba a rechistar pero no dijo nada. Zelda se dijo que en el fondo Link ten�a raz�n. Ya casi lo hab�a olvidado� Midna hab�a sacrificado su vida por Hyrule, por ella� No, no pod�a dejarla morir. Levanto la cabeza y miro con una ligera expresi�n de suficiencia a Link indic�ndole que finalmente le guiar�a hasta esa sala.

-Esta bien Link. Tu ganas� te ense�are esa habitaci�n.

Zelda fue hacia la entrada de su sala, se dispon�a a salir fuera, a los jardines. Link lo vi� un poco extra�o.

-La sala secreta� �No tendr�a que estar aqu�, en el trono de la princesa?

-De echo, esta aqu�- respondi� Zelda impasible-.

-�Y por que salimos fuera?

-Te lo explicar� en los jardines.

Link no ten�a ganas de discutir o decir que estaban perdiendo el tiempo, as� que accedi� a ir. Salieron fuera, y otra vez Zelda mando a los guardias que se retirasen de esa zona. Para desgracia de Link, Zelda le llev� a la parte del jard�n donde estaba el espejo roto� �No quer�a estar all�!, no le gustaba aquello, le tra�a recuerdos.

-�Qu� hacemos aqu�, princesa?-Esta vez no dejar�a pasar por alto el estar all�-.

-Veras� para poder usar el squareportation solamente registrando tus recuerdos, se necesita una �esencia� de lo ultimo que hayas visto relacionado con ese lugar. Conc�ntrate en el espejo y recuerda la �ltima vez que sentiste que algo del Crep�sculo pasaba por �l.

Link no pregunt� nada, se limit� a obedecer. Cerr� los ojos y se concentr� tanto en la imagen del espejo que parec�a estar vi�ndolo con los ojos abiertos, solo el espejo, nada a su alrededor, solo el espejo� Record� intensamente cuando el hab�a pasado por all�. En ese momento hab�a viajado del mundo de los vivos al de los muertos pr�cticamente y apenas se hab�a fijado en detalles. Ya se hab�a concentrado suficiente. Abri� los ojos.

-Princesa, ya esta.

-�Sientes el espejo dentro de tu alma?

Link no comprendi� muy bien aquella pregunta, pero asinti�. Ya estaba suficientemente concentrado. Volvieron al trono real, Zelda le iba a mostrar por fin el squareportation, o como se llamase.

-Observa bien, Link. Esto solamente lo han visto de siglo en siglo descendientes de la familia real.

Link mir� curioso. Zelda puso las manos de forma que parec�a estar sujetando una esfera y una luz cegadora sali� de ellas impidiendo a Link abrir los ojos. Cuando pudo abrirlos, los abri� muy despacio, fij�ndose bien en lo que ten�a delante: Era la Espada Maestra, Master Sword.

-�Te acuerdas de tu espada? Cuando salvaste Hyrule la volviste a dejar en el bosque si no me equivoco�

-�De que nos va a servir la Espada Maestra?

-No es la Espada Maestra.

-�Es id�ntica, tiene que serlo!

-No. F�jate en el s�mbolo de la trifuerza.

Link se fijo detalladamente. Los tri�ngulos no eran amarillos, si no, oscuros.

-Esta es una especie de �gemela� de la Master Sword. Escucha bien lo que te voy a decir�. Te voy a explicar lo que tienes que hacer para ir al Crep�sculo. Es sencillo y dif�cil a la vez, pero antes necesito saber una cosa, porque si no se la respuesta adecuada no te lo voy a explicar.

-Dime lo que quieras, la respuesta ser� adecuada.

-�Seguro?

-Segur�simo.

-Bien� �Dar�as tu vida para ir al Crep�sculo?

-�Qu�?-pregunt� Link sorprendido-.

-Tienes que contestarme. No digo que vayas a morir, pero dime. �La dar�as?

-� Expl�came eso.

-Veras, si usas la Darkness Sword tienes que atravesarte el coraz�n con ella. Eso no quiere decir que vayas a morir: si te quedas m�s de 15 d�as en el Crep�sculo, morir�s y te quedar�s all� atrapado para siempre. Pero si vuelves cumpliendo ese plazo, estar�s sano y salvo� Puedes volver entre d�a y d�a, l�gicamente si no se pudiera, no podr�as traer a Midna.

Link se qued� pensativo. �C�mo iba a atravesarse el solo? Pero� si perd�a m�s tiempo podr�a pasar algo malo, ten�a que encontrar a Midna cuanto antes.

-Dame esa Darkness Sword.-Link cogi� la espada. Por si acaso eso resultaba mal intent� pensar en algo feliz� pero no le era posible sabiendo que ten�a que clavarse una espada o Midna morir�a. Link dejo su mente en blanco y se clav� la espada en el hondo del coraz�n. No hab�a ning�n t�nel de luz: todo estaba oscuro y el estaba tan atontado que parec�a un sue�o.

*****

-Ey� �Que te despiertes ya!

Link peg� un salto y miro a su alrededor. Que ciudad mas rara y el cielo� que cielo mas raro de atardecer.

-�Eyyyy!

Link gir� la cabeza: un chaval de poco menos edad que el estaba al lado suyo. Ten�a pelo negro alborotado y piel azulada. Era delgado y ten�a ojos rojos.

-Oye t�o te encontr� hace dos horas en medio de la calle y no te despertabas� �Qu� te pasa?

Link tard� en contestar. Mir� a su alrededor: estaban en un callej�n. Los habitantes que pasaban por la calle tambi�n ten�an ojos rojos y piel azulada, entonces� �Por qu� no se hab�an sobresaltado al verle? Un momento� �Ya estaba en el Crep�sculo! El Crep�sculo era una ciudad normal, se notaba que ya no ten�a ninguna maldici�n.

-�Por qu� estamos en un callej�n?-Fue lo �nico que se le ocurri� preguntar a Link-.

-Porque estaba en medio de los guardias.

-�Guardias?

-Si, los guardias de la princesa. La est�n buscando hace unas pocas horas desapareci�.

-�Qui�n? �Midna?-pregunt� Link m�s espabilado-.

-�No te dirijas as� a la princesa! �Nadie la llama nunca as�!

-Yo lo hac�a.-Se le escap� a Link-.

-Claro-respondi� sarc�stico-en tus sue�os.

Link prefiri� no contestar.

-�C�mo te llamas?

-Alan. Especialista en robar en tiendas y colarme en palacio.-Dijo orgulloso, a Link le pareci� una broma, pero no era as�-.

-Yo me llamo Link. �C�mo puedo encontrar a Midna?

-�No llames as� a Midna!

-�Tu lo acabas de hacer!

-�Yo la veo m�s horas al d�a que tu!

�Pero qu�? Buf, que chaval m�s estresante. No aguantaba m�s, pedir�a ayuda en la ciudad� pero antes una cosa.

-Oye� �No te sorprendes por mi color de piel?

-�Qu� dices? Si eres muy normal-contest� Alan sin entender-.

Link se mir� en el espejo del puesto de un comerciante en la otra acera: El mismo rostro de siempre le devolvi� la mirada� bueno, el mismo de siempre con ojos rojizos y pelo gris�ceo, el color de piel al menos lo conservaba.
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MensajePublicado: Dom Abr 26, 2009 10:49 am    T�tulo del mensaje: Responder citando

Cap�tulo IV. Infiltraci�n

-�Qu�? �Pero si yo no soy as�!

-Que t�o mas raro� no se si hice bien en cogerte-le espet� egoc�ntricamente Alan-.

Link no dijo nada. Estaba pensando en pedir informaci�n por ah�, pero no conoc�a nada. Despu�s de reflexionar un poco decidi� que aunque Alan le pusiera de los nervios, lo m�s sensato era ser amable y cort�s, a lo mejor consegu�a algo.

-Perdona. �Tienes alg�n indicio de donde pudo haber ido la princesa?-se le hac�a muy raro llamarla as�-.

-Por supuesto que no, si no ya hubiera ido a buscarla.

-�C�mo que ya hubieras ido? No lo entiendo.

-�Que corto eres!

A Link le apeteci� contestar, pero se contuvo.

-L�gicamente si la hubiera ido a salvar ser�a porque me importa. Solo soy un vulgar ladr�n� �Pero alg�n d�a har� algo grande, y me tendr�n que dar un buen cargo en palacio, tendr� mucho dinero!

-�Por eso quer�as rescatar a Midna?

-Entre t� y yo, amigo� por eso y porque es una belleza, �No crees?-confes� Alan. Se notaba que ya hab�a llegado al �grano� del asunto.

Link se sorprendi�. No se hab�a fijado mucho en eso, pero tampoco hab�a pensado en la posibilidad de que alguien dijera algo as�

-Ya� no se a donde quieres llegar, pero no me apetece preguntar.

Si. Verdaderamente, no le apetec�a preguntar.

-Cambiemos de tema� �Conoces bien la ciudad?

-Como la palma de mi mano.

�Perfecto! �Lo sab�a! Si sab�a como tratarlo, le servir�a como �m�todo de informaci�n��

-�Puedes ayudarme a encontrar a Midna� digo, a la princesa? Necesito encontrarla.

-�Por qu� la buscas?

Hab�a llegado la pregunta que Link intentaba evitar. �Qu� dir�a ahora? Cualquier excusa le valdr�a quiz�s a Alan, o quiz�s no�

-Porque tengo miedo de que haya podido pasarle algo malo.

-No se si malo, pero algo si le ha pasado porque si no, no hubiera desaparecido.-dijo Alan con pesadumbre.

Link ya lo sab�a. Sab�a de sobra que le hab�a pasado algo malo y tambi�n sab�a de sobra lo que probablemente podr�a pasarle. Ahora que lo pensaba detenidamente se le ocurri� otra pregunta interesante.

-Oye, si se supone que aqu� van los muertos�

-Y tambi�n viven aqu� los hijos de muertos, o mejor dicho, los Twili sangre pura-interrumpi� Alan-pero eso lo sabe cualquiera-.

Cualquiera que viva aqu�, pens� Link. Se dispuso a ir al grano.

-A lo que iba, si un muerto� bueno, Twili como se dice, se muriera estando o habido naciendo ya muerto� �Qu� le pasar�a?

-Pues que dejar�a de existir. Desaparecer�a, sin m�s. �Mira que eres rarito! �Todo el mundo sabe eso! �Te estas quedando conmigo?

Link reflexion� de nuevo. Ten�a que pasar desapercibido, intentar�a mejorar en ese aspecto mientras estuviera en el Crep�sculo.

-Si, claro� perdona es que me golpe� y me qued� inconsciente� estoy un poco�

-�Atontado?

Link no pensaba en nada mas, ese cr�o, Alan, le ca�a fatal.

-Algo as�.-Respondi� fr�amente Link-.

-Bueno, �Me ayudar�s o no?

Ya se estaba hartando de esa conversaci�n sin sentido.

-Perdona, pero no soy muy rico que digamos�

-�Qu�?

-�Eres tonto, o qu�? �Qu� obtengo a cambio si te ayudo?

Link ya lo iba pillando. En Hyrule mucha gente era amable� aqu� no sab�a si era igual, pero desde luego, Alan no iba a cooperar gratis.

-Saber que Midna esta bien.

-Si me bastara con eso ya habr�a empezado a buscarla hace horas.

Y ten�a raz�n. Link tampoco hab�a pensado en eso. �Qu� quer�is? Cuando uno se queda inconsciente y de repente aparece en otro mundo, no se entera mucho del asunto (aunque ya se haya ido a ese mundo antes). Ten�a que pensar en algo�

-Te dar� mil rupias. Mil exactamente si me ayudas a encontrarla.

Alan solt� una carcajada seca. �De qu� se re�a?

-�Solo mil? �Mil por encontrar a la princesa del Crep�sculo?

-Muy bien, te dar� ocho mil rupias, mil por cada cosa que me ayudes.

-Ya va mejor, tendr� mucho dinero si la encuentro� pero no. Diez mil, quiero diez mil.

Link no estaba para ponerse a regatear, as� que acept�. Ya solucionar�a el asunto en otro momento.

-Muy bien� �Entonces me ayudar�s?

-Que conste que no te lo confirmo, si estuviera confirmado te pedir�a mas de cincuenta mil rupias por una princesa�

-Con que me ayudes me basta. Expl�came lo que tengas pensado.

-Bien� tenemos que ir a investigar a palacio. Los guardias se guardan informaci�n seguro, siempre lo hacen y no lo cuentan a nadie, por cortes�a real o algo as�. De paso, aprovecharemos para entrar en la sala de armamento para coger unas cuantas armas y equiparnos con un traje robusto, una armadura o lo que sea. Ese es mi plan. �Sabes? Nunca le hice un favor a nadie que no hubiera conocido despu�s de media hora. Por cierto primero pasaremos por la sala de armamento.-Anunci� Alan-.

-�Por qu� primero?

-Porque as� estaremos equipados y tendremos armas para �sacarle� informaci�n a los guardias. Dudo mucho que nos la digan tranquilamente, y esos guardias no se sobornan f�cilmente.

Link se call�. Alan conoc�a el palacio y �l quer�a entrar pero nunca hab�as amenazado a nadie para sacarle informaci�n, siempre hab�a echo favores o algo as�

-Y��No podemos sobornarlos?

-Eres demasiado bueno chico. O eso, o no acepto el trabajo.

-De acuerdo. Vamos.

-T� s�gueme. Es f�cil colarse en palacio, sigue mis pasos.

Alan parec�a un profesional. Se acercaron al palacio, pasando calle por calle, y cuando estaban cerca solo tuvieron que rodearlo para que Alan le mostrara a Link una trampilla por donde entrar que estaba situada a los alrededores en la parte de atr�s del edificio. Salieron en una sala blanca, a Link le sonaba. Ya hab�a estado all� antes, pero antes no estaba llena de armas, ni de trajes. Hab�a algunos elegantes, otros grotescos�

-Yo me quedo con mi ropa. T� coge algo mejor que esa ropa de pueblerino, que hasta pareces un humano llevando esos atuendos� �y que no se te olvide el arma!

Link asinti�. Mir� en los trajes elegantes, eran raros, pero elegantes al fin y al cabo. Todos negros, que g�tico. Se fij� especialmente en uno negro. Era unos pantalones y una chaqueta negros. Se quit� la ropa menos la camisa de debajo y los pantalones. Se puso la camisa negra encima de la camisa blanca y los pantalones negros encima de los de siempre. No ten�a gorro como en su antiguo traje, pero si ten�a un pa�uelo negro de los de ponerse en la cabeza. Ni el se reconoc�a as� mismo con esos ojos, ese pelo y ese traje. Era incre�ble. Lo �nico humano que ten�a era la piel y por lo visto los Twili de sangre media o los que hab�an muerto en el mundo de los vivos tambi�n ten�an la piel as�, as� que nadie se sorprend�a. Alan hab�a cogido una especie de tubo negro raro, Link cogi� una espada afilada, no era exagerada como las que hab�a ah�, que eran enormes y pesaban un mont�n, era f�cil de manejar. Link la prob� en el aire. Alan le hizo un gesto para que se acercara y le explico que el aparato negro era una especie de brazalete que lo met�as en la mano y disparaba flechas envenenadas. Alan hablaba en bajo.

-Ahora nos acercaremos a esa sala, donde los guardias. El consejero m�s fiel de la princesa esta ah�. Justo lo que necesitamos. Ya se que eres un ciudadano normal, un debilucho, pero yo ya estoy entrenado en esto.

Link se enfureci� de nuevo. Seguro que era mucho m�s fuerte que el, �Era el h�roe de los mundos! Si ese est�pido lo supiera�

-Yo me entrenaba de ni�o-minti� Link- se manejar una espada bastante bien.

-Ya, claro. Haz lo que te de la gana, si mueres me ir� sin ninguna culpa.

Los dos entraron en la sala por el pasillo de la derecha sin hacer el menor ruido. No hab�a guardias, Alan le explic� a Link que por los pasillos que conduc�an al trono, por muy raro que pareciese, solo andaba Midna y el consejero real. Desde un �ngulo donde se situaron escondidos en el pasillo observaron como un anciano le�a un libro sentado en el suelo, al lado del trono. Link se di� cuenta: en esta sala se hab�a sentado Zant cuando el y Midna entraron a Palacio. Alan le hizo un gesto de que le siguiera, se acercaron al anciano escondiendo las armas y con paso firme. Cuando el anciano se percat� de ellos se sobresalt� y gir� la cabeza.

-�Qui�nes sois?-pregunt� tranquilamente, aunque se acababa de asustar, parec�a como si hubiese visto una mosca-.

Link no sab�a que decir, aunque eso para Alan era obvio. Alan se le adelant�.

-Perd�nenos por irrumpir aqu�. Como seguramente usted ya sabe, no podemos estar aqu�

-�eso significa que busc�is algo prohibido-acab� de decir el anciano-.

-Si, exactamente. Necesitamos informaci�n sobre que le ah pasado a la princesa, por las buenas, o por las malas. No me gusta ser agresivo ni intimidador y a mi compa�ero tampoco.

Alan le echo una mirada a Link. Link segu�a perplejo, pero para cualquier pregunta reaccionar�a. El anciano se qued� meditando.

-Esta bien, os dir� informaci�n.

Link no se lo cre�a. Alan estaba satisfecho.

-Aun as�, no os servir�, no pod�is hacer nada. Seg�n los conocimientos que poseo, la princesa ten�a una visita importante y me pidi� que la dejara sola, cosa poco habitual en ella. Vino alguien muy extra�o, no se si era un Twili de sangre media, pero ten�a el pelo rubio y los ojos, naturalmente, rojizos. Me parece que la princesa se dirigi� con esa persona a las Llanuras del atardecer. Desde ah�, no se supo nada m�s de ella. Hay guardias patrullando la zona, pero de momento ni rastro. No creo que pod�is hacer nada para encontrarla, Alan.

-Da igual, yo y Link investigaremos la zona. �Verdad?

Link asinti�. Finalmente, Alan cooperaba m�s de lo esperado. Cuando salieron de palacio, Alan le explic� donde quedaban las llanuras del atardecer (cosa que Link no entendi� ni un pito), y los dos se dirig�an hacia all� (no sin antes �coger prestado� un caballo en el palacio y darle las gracias al anciano, que por lo visto se llamaba Galileo y conoc�a a Alan de toda la vida, fl�palo). Link echaba de menos a Epona, aunque los caballos eran obedientes, no estaba acostumbrado a montar en otro. Mientras viajaban, Link no pudo evitar preguntarse porque la Darkness Sword hab�a desaparecido� Lo �nico que se le ocurr�a era que se hab�a quedado en el mundo real, al tiempo que el se esfumaba. Ahora se estaba preguntando como podr�a volver antes de quince d�as, no hab�a nadie all� que se lo dijera. Ya ten�a algo que preguntarle a Midna cuando la viera.

*****

-Princesa� tiene que hacerme caso. Lo que le digo es verdad, va a pasar, no lo desaproveche.

La chica de piel azulada, y pelo rojo, quiz�s anaranjado, se par� a pensar. Si eso hab�a pasado de verdad, ten�an que salir de su escondite, porque dentro de poco, habr�a ciertas personas en las Llanuras del atardecer, pero si ese desconocido le estaba mintiendo, adi�s a todo.

-Te doy una oportunidad. Salgamos de aqu� y esperemos escondidos en las llanuras. Veremos si eso es verdad.

-De acuerdo princesa, muchas gracias por escucharme-dijo el chico de pelo rubio y ojos rojos-adem�s, �Qu� pod�is perder? Si yo soy un humilde ciudadano.

-Perdona, estoy acostumbrada a las traiciones Grey, no sabes cuanto.



*****



Ya se pod�an ver las llanuras del atardecer y estaba anocheciendo. Que raro, se supon�a que en el Crep�sculo no anochec�a, �Ser�a un mero cuento? Se lo preguntar�a a Alan m�s tarde.
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MensajePublicado: Mar Abr 28, 2009 8:41 pm    T�tulo del mensaje: Responder citando

Cap�tulo V. Es posible



Hac�a dos horas que estaban en las Llanuras del Atardecer. Alan le hab�a dicho a Link que no bajara la guardia porque all� hab�a soldados patrullando y los soldados del castillo no dejaban a nadie acercarse a esa zona. Link intuy� que los soldados crepusculares deb�an de ser un poco agresivos. Alan tambi�n le hab�a explicado que eso del atardecer solo era un mito como muchos otros entre los mortales, en el Crep�sculo tambi�n anochec�a, pero por la ma�ana el cielo era de atardecer, y as� hasta la noche. Por eso los mortales dec�an que la hora del atardecer era la hora crepuscular. Alan y Link estaban sentados en torno a una hoguera, una hoguera peque�ita pens� Link.

-Ey t�o, �Por qu� no te quitas el sombrero ese?-pregunt� Alan rompiendo el silencio-.

-�El pa�uelo? Es c�modo, lo cog� en palacio.

-�Para que lo quieres? Es de tela, no protege de los golpes. Podr�as haberte puesto un casco�

-Los cascos son inc�modos, prefiero esquivar los golpes, ser ligero y estar c�modo.

-Ni que estuvi�ramos en una tienda de ropa�

Alan puso cara de asco. Link estuvo a punto de re�rse imaginando que Alan no pisaba muchas tiendas de ropa, cuando se dio cuenta de que el casi siempre usaba la misma. Aun as�, por dentro le hizo gracia. Le rugieron las tripas, ten�a un poco de hambre.

-�Tienes hambre eh?-sonri� picadamente Alan-.

-Si, un poco.

-Bueno, ya sabes lo que dicen, la comida es un capricho. Solo tendr�s que estar sin ella diez d�as.

Link abri� mucho los ojos. �Diez d�as sin comida? �Estaba de broma? �Morir�a! Entonces cay� en la cuenta. Morir� verbo morir� los Twili estaban muertos, por tanto no pod�an morir y eso significaba� que la comida se podr�a considerar un capricho, porque no les har�a falta comer. En ese momento, supo que pasar�a bastante tiempo hasta probar un bocado de comida�y quiz�s de agua.

-Tienes una cara mal�sima chaval.

-Ya te dije que me llamo Link-respondi� Link molesto-.

-No me gusta llamar por el nombre a los que no me caen bien.

�Ale! �Y lo dice tan ancho! Menudo t�o� ojala le hubiera tocado un Twili m�s majo como compa�ero�

-Como quieras.

-Por supuesto.

Link gir� la cabeza enfadado. Hab�a momentos en los que Alan le ca�a un poco mal y otros en los que le ca�a fatal. Este era uno de esos momentos. Despu�s de estar otra hora junto al fuego con escasas palabras de Link y planes de c�mo continuar el rastreo de Alan, decidieron que no iban a dormir y buscar�an alg�n rastro de algo en lo cercano a las Llanuras. Todo estaba oscuro, se vislumbraban pocas cosas con la luz tenue de la luna. Alan no encontraba rastros de aura, seg�n el sab�a distinguir el aura de Midna. Por lo visto la sangre real ten�a un aura especial que resaltaba la atenci�n. Una mala idea, hab�a dicho Alan, as� eran m�s localizables. Link se enter� de que los Twili de sangre pura (solo los de sangre pura) pod�an percibir rastros de energ�a del aura de una persona, aunque costaba, pues el aura ten�a que ser muy fuerte o resaltar mucho de alguna forma. Link solo le segu�a: sab�a luchar, no encontrar rastros de energ�a, no era un Twili, m�s bien un mortal convertido en Twili y ni siquiera estaba muerto, era como una especie de Twili falso o muerto falso (o eso esperaba�).

-�Ey, chaval! �Ya encontr� algo!

Link fue hacia donde Alan apresuradamente.

-�Qu�, el qu�?

-Aqu� percibo un aura oscura enorme� aunque no veo nada, podr�a estar escondido o camuflado, no bajes la guardia-murmur� Alan se�alando hacia toda la zona de su derecha-.

Todo pas� muy r�pido. Alan se ech� hacia atr�s, Link no entendi� el por que hasta segundos despu�s, cuando reflejada por la luna llena, vio una sombra abalanzarse hacia ellos. Fueron instantes y la sombra se lanz� contra Link y Alan, instintivamente Link hizo adem�n de sacar la espada. Alan ya ten�a el brazo preparado para lanzar alguna flecha, pero los segundos que Link tard� en mover el brazo hacia atr�s para agarrar la espada y los segundos que Alan tard� en apuntar a su objetivo con el brazalete negro pareci� ser suficiente para que aquel extra�o personaje les empujara hacia atr�s y les robara las armas. Incluso pudo quitarle el brazalete del brazo a Alan, incre�ble. Mas tarde se dieron cuenta de que no se lo hab�a quitado, si no, que le hab�a rasgado la tela con alg�n tipo de magia, por lo dem�s, el brazalete funcionaba.

-�Mu�strate escoria!-grit� Alan con rabia-.

Link call�. Solo observaba a la sombra que estaba delante de ellos, llevaba una capucha con un traje negro. Le record� a Zelda la primera vez que la hab�a visto con la capucha. El personaje, en apariencia apacible, se quit� la capucha y dejo ver un pelo rubio y unos ojos rojizos como la sangre� no pod�a ser� Link lo reconoci�, �Era Grey! �Imposible!

-�Grey! �Qu� haces aqu�?-dijo Link sorprendido-.

-�Qu�? �Ya lo conoces?- pregunt� Alan igual de sorprendido que Link-.

El que parec�a ser Grey no les hizo caso. Gir� atr�s su cabeza y otra sombra apareci� detr�s de �l, era una mujer.

-�Hac�a falta quitarles las armas?-pregunt� con voz seca la mujer-.

-Podr�an heriros con la espada, adem�s, este es un antiguo brazalete del palacio, un ejemplar �nico que lanza una especie de dardos venenosos.

La mujer pareci� sorprenderse, aunque pareci� reconocer el aparato cuando lo vio de cerca. La luz de la luna no solo hab�a mostrado el rostro de Grey, tambi�n el de la mujer, ah� hubo �reacci�n general�:

A Link casi le da algo.

Alan abri� tanto la boca que una docena de moscas cabr�an por ella.

Grey por fin les hizo caso y miro extra�ado a Link.

Midna se dio cuenta de quien era una persona de los que estaban en frente y abri� la boca tanto o m�s que Alan.

El silencio se apoder� de la ocasi�n unos instantes. Midna no se lo cre�a, miraba como si estuviera so�ando.

-Tu no ser�s� eres� -lograba decir Midna entrecortadamente-.

-�Midna! �Midna! �Te encontr�!

Link estaba que desbordaba alegr�a, si no hubiera gente, se habr�a puesto a dar saltos. �Ya pod�a salvarla! De alguna forma� �Pero podr�a! �Y para encima la hab�a vuelto a ver! Eso no era tan importante, pero algo es algo.

-�Link? �Eres tu?-Midna segu�a estupefacta-.

-�Qui�n voy a ser? �No me ves? Bueno, la vestimenta� em�

A Link le pareci� malo comunicarle a la princesa del palacio que era de all� de donde hab�a sacado la vestimenta y el arma, pero parec�a obvio as� que lo dijo:

-La cogimos en palacio, el pa�uelo, y el traje negro� tambi�n la espada y el brazalete� �Pero ya te encontr�! �Tengo mucho de que hablar contigo!

-�De verdad eres� Link?

-�Que si! Si te extra�a ver mi pelo as� y mis ojos, yo tampoco lo entiendo, �Pero da igual eso!

Si Midna no fuera azul, ahora mismo, se le notar�a un cierto aire p�lido.

-�No estas muerto, verdad?

-Creo que no, pero da igual, �Tengo que cont�rtelo todo! Antes de eso, �Estas bien? �Te ha visitado alguien raro aparte de Grey? �Qu� te han dicho? �Te han hechizado? �Has visto alguna premonici�n?

-�Quieto parado!-replic� Midna recomponi�ndose a la nueva situaci�n-Espera un momento�

Alan se hab�a arrodillado delante de Midna y Grey. Vale, es un t�o caradura, ladronzuelo y macarra, pero el muy cabr�n a la princesita le tiene respeto, no como a otros, pens� Link.

-�Qui�n narices es este?-Pregunto Midna con su habitual toque. Uno que hac�a tiempo que Link no o�a-.

-Se llama Alan. Me ayud� a�

Alan mir� mal a Link como dici�ndole que si contaba lo de colarse en palacio le mataba, pero ya era tarde.

-�Colarte en palacio?-Pregunt� Midna.

-Em� si� �Pero se lo ped� yo! Incluso le voy a pagar�

-�Tu pagar por un favor?-pregunt� Midna-�No te estar� utilizando?

-No, �l no es como tu.

-�Oye!

-�Bueno, como eras tu antes, ya me entiendes!-se excus� Link-.

-A sus servicios-interrumpi� Alan-.

-Dios m�o, lev�ntate del suelo, que vas a comerte la tierra�que exagerado�-murmur� Midna-.

Link empez� a re�rse. Por primera vez desde que hab�a venido, se re�a con ganas. Ahora Alan ya no le trataba con desprecio� �eh? que divertido. Alan reaccion� al momento y se levant� alej�ndose de Link unos cent�metros.

-Perdone� �Puedo hablar con mi compa�ero?

A Link esto no le gustaba nada.

-Claro, habla con tu amiguito-contesto Midna mientras disfrutaba un poco de la cara de sufrimiento de Link-.

Alan y �l se fueron alejando tres metros y empezaron a susurrar.

-�Como no me dices que conoces a su majestad!

-�Es una larga historia! Que pena que no te la pueda contar�

Link volvi� a reirse en bajo.

-Pues me la tendr�s que contar ahora o despu�s� ni�ato.

-�Si tu eres tan ni�ato como yo! �Y que eran esos respetos cuando est�bamos con Midna, eh? �Ves como la llamo Midna! �Y me r�o, ahora soy yo el que se r�e!

Alan le miro con desprecio. Link se hab�a quedado m�s a gusto que un ocho.

-Despu�s me lo contaras-dijo amenazadoramente Alan-.

-Claro�

-Y� me cuesta decir esto� p o r f a v o r�.no me dejes mal delante de ellos.

Link sinti� que por primera vez estaba en condiciones de chantajear a Alan y se sinti� genialmente genial.

-De acuerdo.

Los dos volvieron donde estaban.

-Link. Grey me ah contado porque has venido, no tienes que explicarme nada.

-Es un alivio que te haya encontrado tan pronto...

-Pero� �C�mo le conoces? Es un Twili de sangre media.

-�Qu� dices? Es un humano normal y corriente, d�selo Grey.

Grey call� un momento.

-Perdona... Link o como te llames, no te conozco de nada. Nunca nos hemos visto. �Eres un mortal?

Link estaba sorprendido de nuevo.

-�Qu�? �Si nos vimos en la tasca! Y me dijiste lo de la Darkness�

Link call� cuando se dio cuenta de la importancia del secreto.

-Yo no te vi jam�s, no te conozco.

Grey no parec�a estar mintiendo, pero Link estaba muy seguro.

-Estoy cansada. Ya que no podemos volver a palacio refugi�monos en alguna cueva de las Llanuras-Sugiri� Midna-.

-Me alegro de verte.

Midna se call� y se qued� pensativa. Despu�s mir� a Link.

-Soy la t�a mas mala que hayas visto en tu vida, adm�telo.

-�Qu�? �Por qu�?

-Porque yo tambi�n me alegro, pero tengo una reputaci�n.

-Creo que es la primera vez que admites que te alegras de verme.

-�Insin�as que ya me hab�a alegrado antes?

-Puede.



*****



-Nunca hab�a dormido en una habitaci�n de palacio- le cont� Alan a Link-.

-Buenas noches, por fin dormir�

-Link� �Eres mortal?-pregunt�, por primera vez amablemente Alan con su sonrisa macabra de Twili-.

-Qu� mas da� por cierto� �Me has llamado por mi nombre?

Alan tard� en contestar.

-Puede.

Dulces sue�os ba�ados por la luna, pens� Link.
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MensajePublicado: Mie May 06, 2009 6:07 pm    T�tulo del mensaje: Responder citando

Cap�tulo VI. Encuentra la espada y Vive



Era por la ma�ana, todos estaban en una sala del Palacio al aire libre. Alan y Link se estaban entrenando, Alan hab�a dejado moment�neamente el brazalete y hab�a cogido la espada. Midna les hab�a dicho que pod�an salir cuando quisieran a ese espacio, y nada m�s despertarse con la luz del sol, Link decidi� salir. Alan inc�modo por estar solo en una habitaci�n de palacio, le sigui�, pero no dijo nada. Ahora, desde hac�a media hora que hab�a servido para que Alan aprendiera que Link no era un debilucho y hab�a cogido la espada en alg�n momento de su vida, los dos estaban entren�ndose. Link ya se conoc�a todo, si pasaba algo malo en cualquiera de los dos mundos, seguramente habr�a gente poderosa infiltrada en el asunto y ten�a que estar preparado para luchar contra ella (y contra el que intentara asesinar a Midna). Midna ya sab�a lo de las visiones, las visiones de un tal Grey, que seg�n dec�an era un Twili de sangre media, pero Link se negaba a creer eso. Adem�s, a no ser que Grey estuviera disimulando, este dec�a que no conoc�a a Link para nada y que no lo hab�a visto nunca. Link le hab�a visto en la tasca, pero como no quer�a quedar como un tonto y hab�a cosas m�s importantes en que pensar, no insisti� en ese asunto. Por otra parte, Link le hab�a preguntado a Midna la forma de volver a Hyrule, Midna le hab�a dicho algo inquietante: se supon�a que cuando viajabas con la Darkness Sword, esta aparec�a al lado tuyo o permanec�a contigo en el viaje, es decir, cuando Link se despert�, la Darkness tendr�a que estar con el, pero no estaba. Por eso cuando Midna y Link se hab�an encontrado, Midna hab�a pensado que Link era un muerto: porque en lugar de esa espada, llevaba una t�pica del Crep�sculo. Despu�s ella hab�a reflexionado y le hab�a dicho a Link que al comprobar su aura hab�a podido notar que era el aura de un vivo, as� que no pod�a preocuparse. Lo que importaba ahora era saber donde estaba la espada, porque en alg�n sitio ten�a que estar. Link hab�a decidido que ya se ocupar�an de eso m�s tarde, que lo que importaba era aprovechar los catorce d�as que quedaban en buscar pistas sobre el presunto asesino de Midna. Ahora que la princesa hab�a vuelto, el pueblo del Crep�sculo estaba muy contento, sobre todo Galileo (el consejero), que se hab�a molestado en dar la noticia a todo el Crep�sculo esa misma noche.

�ZAS!

Link hab�a echado atr�s a Alan usando la t�cnica del ataque del escudo y cuando estaba atr�s le hab�a rozado un poco con la espada. Alan tambi�n le hab�a rasgu�ado a �l antes.

-�Venir aqu�! Parad un poco�-Dijo Midna. Estaba al otro lado de la sala, vi�ndolos combatir, Grey estar�a por palacio-.

Alan y Link tiraron las espadas y se acercaron caminando hacia donde estaba Midna.

-�Qu� pasa?-Pregunt� Link-.

-Parad. Haber� quiero contaros lo siguiente que vamos a hacer.

-�A hacer?

-Si. Veras� aunque parezca extra�o Grey ha tenido otra visi�n.

-�Otra m�s? �Pasaba algo malo?

-Ahora os lo cuento, al parecer, cada d�a que pasa tiene una visi�n nueva.

-Solo puedo permanecer aqu� catorce d�as m�s, si no, morir� eternamente-susurr� Link fr�amente-.

-Entonces habr� bastantes visiones. De momento nos conformaremos con lo que tenemos. Al parecer hay algo m�s� en todos los lugares en que Grey tiene visiones pasa algo raro. �Te acuerdas de donde me mat� ese hombre?

Link se esforz� por recordar. La imagen era un mero recuerdo borroso, no pod�a identificar nada.

-Entiendo�-confirm� Midna-de todas formas, hablemos con Grey, os lo contar� todo.

Midna los llev� a la sala del trono. Cuando llegaron le pidi� educadamente a Galileo que saliera de la sala y dej� la parte de hablar a Grey. Alan no dec�a nada, estaba como avergonzado.

-Bien, hemos llegado a una conclusi�n sobre lo que pudo pasar con la Darkness Sword, Link.

-�Sabes donde esta?

-No. Pero dado que tu aura es de un ser vivo quiere decir que tienes que haber venido con la Darkness Sword a este mundo, y si no la tienes, eso significa que alguien la cogi� aprovechando tu inconsciencia. Es decir, la robaron mientras estabas dormido-concluy� Grey serenamente, como de costumbre-.

Link mir� hacia Alan. No confiaba en el pero no pod�a creer que el la hubiera robado�

-Alan� t� eres el �nico que estaba conmigo.

Alan se enfureci�.

-�Yo no cog� esa cosa!-se defendi�-.

-�Nadie m�s pudo hacerlo!-replic� Link-.

-Link, Alan tiene raz�n.-Ahora era Midna la que hablaba-Si �l la hubiera cogido porque hubiera cre�do que era de valor� �No crees que se habr�a ido con ella en vez de quedarse a tu lado? Ser�a muy est�pido quedarse ah�, adem�s, el no ten�a la espada cuando despertaste.

Link reflexion�, era cierto. Se habr�a ido� pero entonces� �Qui�n?

-Ya hablaremos de eso m�s tarde. Ahora hablemos de mi visi�n. Los recuerdos son borrosos pero recuerdo que hab�aun ni�o peque�o que estaba en un desierto. En el desierto no hab�a nada, estaba agrietado. No conozco ese lugar, pero seguramente pase un suceso importante dentro de poco en ese lugar, estoy seguro, mis predicciones nunca fallan.

-�C�mo se supone que iremos si no sabemos el lugar?-Pregunt� Alan-.

Por primera vez Link y Midna se miraron con complicidad.

-Sin duda ese sitio es... el desierto Gerudo que hay en Hyrule-.

-Lo primero que tenemos que hacer es buscar la Darkness Sword, cuando la encontremos, pasaremos ordenadamente por los lugares de las visiones que haya tenido Grey, necesitamos esa espada para ir a Hyrule.

-�Y como la encontramos!-Link estaba de los nervios-.

-Galileo-dijo Grey a modo de respuesta-.

-�Qu� tiene que ver Galileo?-Pregunt� Alan-.

-Galileo tiene el poder de visualizar un objeto, con que haya visto uno casi igual que ese o similar te dir� donde se encuentra en un abrir y cerrar de ojos-declar� Midna-.

-El �nico objeto parecido es la Espada Maestra y dudo que la haya visto-dijo Link esperanzado de que Midna tuviera una hip�tesis para contradecirle. Y as� fue-.

-Si, casualmente Galileo ya vi� la espada maestra. Galileo tiene 635 a�os, no es mucho para un Twili esa edad. Pero es sabio y cuando aun viv�a lucho al igual que tu para salvar los dos mundos. El tambi�n era un elegido.

-�Por qu� no me dijiste nada de esto hace dos meses y medio, cuando est�bamos salvando Hyrule?

-Hay cosas que tengo prohibidas decirte. Adem�s, �Por qu� tendr�a que hab�rtelo dicho?

Link iba a protestar pero cay�. Era verdad� �Por qu�? Aunque no ten�a nada que decir, sent�a que le quedaba alguna raz�n para protestar-.

-Yo que se, alo mejor hac�a falta o� �No somos amigos?-fue la �nica y d�bil excusa que se le ocurri�-.

-Tu eres el elegido para salvar el mundo de la luz. Yo soy la princesa del Crep�sculo. No tiene nada que ver lo uno con lo otro.

A Link le fastidi�, pensaba que Midna hab�a dejado hace tiempo de hablar con tanta frialdad.

-Pero cuando derrot� a Zant� Me dijiste que aunque al principio me utilizabas� �Decidiste ayudarnos a mi y a Zelda! �Por que raz�n entonces!

-Porque os portasteis bien conmigo. Soy una princesa, devuelvo favores, tal y como debe ser, no iba a dejaros tirados. Aunque ten�a una maldici�n segu�a y sigo teniendo mi honor.

-�Ah si? Quieres decir que solo sacrificaste tu vida� �Por honor? �Y cuando yo te intent� parar para que no te pasara nada cuando usaste la sombra fundida? �Por qu� me tele transportaste?

-Para que no os pasara nada-admiti� Midna- pero sigue siendo por lo mismo.

-No estamos discutiendo sobre amistades ni tonter�as-record� Alan-vamos a ver a Galileo ahora mismo-.

Link desvi� la mirada. Sigui� a Alan y a Grey por el pasillo limit�ndose a mirar al suelo, Midna por su parte estaba bastante tranquila aparentemente. Eso le fastidiaba mucho, much�simo. Cuando llegaron donde Galileo los esperaba le contaron todo. Cuando Galileo se enter� de todo, le explic� a Link lo de que era un Twili no-puro porque ven�a directamente del mundo de los vivos. Le explic� que hab�a muerto mientras intentaba salvar los dos mundos, una vez los hab�a salvado y la segunda muri�. ��Por qu� te moriste?� hab�a preguntado Link �No lo recuerdo, hace algunos siglos desde eso�� hab�a respondido Galileo, pero Link no le cre�a. No cre�a que a alguien se le olvidase la causa de su muerte. Aun as�, no dijo nada y escuch� sus palabras.

-Acabo de memorizar la espada maestra y la Darkness Sword. Acabo de ver una especie de taberna� creo que es la taberna �Sacrifice�, de la Ciudad.

-Decididamente, creo que el nombre pega con el lugar-brome� Alan-.

Galileo lo ignor�.

-Midna, vamos a esa taberna.

-Link, pens� que pensabas antes de hacer las cosas.

-�A qu� viene eso ahora?

-�La princesa del Crep�sculo no va a ir tan tranquilamente por la ciudad como si nada, y menos si la quieren matar!-Apremi� Alan-�D�nde se ah visto eso?

Midna y Alan miraron a Link con reproche. Grey miraba hacia el suelo y Galileo le miraba con culpabilidad. Link pens� que esa ma�ana, sin duda, se hab�a levantado con el pie izquierdo.

-�Y como sabemos donde esta esa calle?

-EJEM-hizo notar categ�ricamente Alan-�Te crees que no se donde esta esa calle? Ya te dije que me conozco en crep�sculo como la palma de mi mano.

-Entonces tu y yo vamos a ese sitio y buscamos la espada.

-Claro� a cambio de que me cuentes de que va todo esto y me pagues mis diez mil rupias.

-�No tengo aqu� diez mil rupias! Te las entregar� en otro momento� y esto� ya te lo explicar�.

-�Prometido?-dijo Alan desconfiado-.

-Por supuesto. Y tu Midna� �Te quedaras sola en el palacio? �No ser�a mejor que vinieras?-se preocup� ink-.

-�No me quedo sola! Est�n Galileo y Grey. Galileo es mi consejero y Grey sabe artes m�gicas.

-Como sabes� que Grey es de confianza.

-No lo se, lo intuyo. Adem�s, �Por qu� si no me cont� sus visiones?

-No te precipites, pi�nsalo.

-No te preocupes por mi, peque�o papa noel verde.

Grey, hasta ahora inexpresivo, mostr� una ligera sonrisa. Alan empez� a re�rse y a Galileo poco le faltaba para empezar a re�rse tambi�n. Link tem�a que se les sumar� Midna de un momento a otro y que todos se empezar�n a re�r de aquel �insulto�. Finalmente, Midna se les uni�, no aguantaba m�s.

-�Tampoco hace tanta gracia!-grit� Link furioso-.

-Joder� �Pues yo me parto!-dijo Alan intentando hablar con normalidad y dejar de re�rse-.

-�Claro, como te gusta Midna!

Alan dej� de re�rse y mir� a Link odiosamente. Link hizo lo mismo.

-Uy, que Papa Noel se enfada�-dijo Midna-no le hagas caso Alan, esta desvariando.

-�Yo no me enfado! �Me voy a buscar la Sacrifice esa, o como se llame!

Link sali� de la sala dando un portazo. Cuando estaba fuera del castillo se encontr� solo, pero camin� de frente para llegar a la ciudad. All� preguntar�a.

-�C�mo piensas ir si no sabes donde leches esta?-dijo una voz a su espalda-.

Link se gir�. Era Alan y estaba cabreado. Link se encogi� de hombros y le mir� mal.

-�Te parece bonito soltar eso delante de todos?

-�Qu� pasa? �Es verdad acaso?

-Cre� haberte dicho algo parecido. No juegues conmigo o te matar�.

Link el poco tiempo que hab�a pasado con Alan hab�a depositado unos peque�os �gramos� de confianza en el porque al fin y al cabo, no parec�a mala persona. Esos gramos se acababan de esfumar de golpe cuando volvi� a la realidad: Alan era un desconocido que se hab�a encontrado en la calle y que estaba ayud�ndole por dinero y por un posible inter�s en Midna, nada m�s.

-No jugar� m�s, tranquil�zate-afirm� Link fr�amente-.

-Vale. Ahora toma tu espada, que te la dejaste dentro.

Alan le arroj� el arma a las manos y se puso el brazalete en la mu�eca.

-Vamos.

*****

Paseando por el mercado lleno de ni�os divirti�ndose y gente, llegaron a una puerta sucia y maloliente. Alan abr� la puerta y Link entr�. Se sentaron en los asientos de la barra.

-�Quer�is tomar algo?-Invit� majestuosamente el camarero-.

-Si, dos vinos tintos, para m� y mi compa�ero-respondi� Alan-.

El camarero asinti� y se fue de la barra. Antes de irse se fijo en Link detalladamente (cosa que no pas� desapercibida para Alan) y se puso a hablar con su compa�ero. A Alan no le gust� als expresiones de sus caras.

-Link, prep�rate. Dentro de unos segundos desenfundar�s la espada y nos prepararemos�

-Si� esos tipos no me dan mala espina�

El camarero volvi� a la barra hacia donde Link y Alan� sin los vinos, por cierto.
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R4ml
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MensajePublicado: Sab Jun 13, 2009 5:31 pm    T�tulo del mensaje: Responder citando

Cap�tulo VII. Un hilo de vida, otro de muerte

Alan y Link estaban dispuestos. El camarero volvi� a la barra� y cual fue la sorpresa de Link al ver lo que ten�a en las manos. All� estaba la Darkness Sword, aquella espada id�ntica a la maestra. Link se puso nervioso, Alan intuy� lo que hab�a visto Link e intent� aparentar (real�sticamente, todo hay que decirlo) que estaba tranquilo y no hab�a visto nada. La gente del bar segu�a bebiendo, alguna cantando en el �escenario� ajena a lo que pasaba en la barra. El camarero ten�a una expresi�n de incomodidad.

-Supongo que vendr�is a buscar esto. Le�n, mi compa�ero, lo encontr� en la calle hace unos d�as.

Link no se lo tragaba.

-Y por que�

-�Puedes traernos a el tal Le�n?-interrumpi� Alan tan astuto como siempre-.

El camarero dud�.

-Por supuesto.

Se gir� hacia la cocina y le hizo una se�a a su compa�ero, este, accedi� inmediatamente a venir. Una vez en la barra pareci� entender todo.

-�Es esta espada vuestra?

-De mi compa�ero, pero debemos hablar de�

-�AAAAAAGHHH!-Chill� Le�n con todas sus fuerzas, y su media melena casta�a le cubri� la vista. (Cosa que el pareci� agradecer).

-�Qu� pasa? Aun no le dije de que tenemos que hablar�-Se sorprendi� Alan-.

-Tu� �El muchacho de pelo gris! �T� deber�as estar muerto!

Alan observ� a Link.

Link no entend�a nada.

-�No estoy muerto!

-�Todos lo estamos, chaval! Pero ya sabes� deber�as haber dejado de existir.-continu� Le�n-.

Link se molest�.

-�Qu�?

-Mi compa�ero pens� que te hab�an clavado esta arma y que ibas a ser inexistente. Te vio tirado en el suelo, y pens� que ser�a un acto de vandalismo.

Link a�n no lo comprend�a, pero ahora hab�a mas dudas.

-Dime Le�n� �Por qu� cogiste la espada?

Le�n a�n andaba nervioso pero parec�a asimilar que se hab�a equivocado.

-Porque el mercado estaba lleno de gente y si me miraban� seguro que pensaban que hab�a sido yo.

-�Fue mejor esconder el arma?-continu� Alan-.

-Si, en ese momento, pens� que si la escond�a era lo mejor. Despu�s la traje aqu� y se la di a este.

La historia no parec�a cuadrar muy bien, pero lo que contaba es que ya ten�an la espada, nada m�s importaba.

-Bueno, es lo mismo, como pod�is observar mi amigo esta �vivo�, y no pas� nada.

Como vieron que and�bamos con prisas, nos la dieron y no dijeron nada m�s, aunque siguieron cuchicheando (lo que molest� a Alan). Alan y Link salieron del bar. Con el susto hab�an podido beberse los vinos e irse sin pagar, nadie se hab�a acordado de la cuenta.

-La historia de ese tal Le�n y su amiguito no me cuadra-coment� Alan Pensativo-.

-Da igual� ya la tenemos. Por cierto Alan, �Qu� es eso de inexistente?

-Dejar de existir.

-Eso ya lo se, pero por lo que pude comprobar si eres un Twili y estas muerto, si te vuelven a matar eres inexistente�

-F�cil; dejas de existir.

-Tiene sentido.

-Demasiado como para que me lo preguntes.

Ya estaba Alan de malas. Parec�a haberse acordado de la situaci�n que se hab�a dado antes de salir de palacio, y no le apetec�a hablar con Link. Link pens� que se hab�a pasado y que no tendr�a que haber dicho eso, es m�s; no sab�a porque lo hab�a dicho. Desde luego, tanto Link como Alan ten�an un orgullo demasiado alto como para disculparse o mencionar ese tema, as� que se limitaron a mostrar los sentimientos mediante gestos y contestaciones poco habituales y algo molestas. Casi no se hablaron en el camino de vuelta, Link sinti� un gran alivio al llegar a palacio, aunque all� tampoco es que hubiera gente muy agradable con el. Al menos Galileo era refunfu��n, tranquilo y con buen coraz�n. Midna no paraba de molestarle con algo, re�rse de �l o incluso intentar aparentar que Link y su amiguito no le importaban nada. Eso dol�a. Link se qued� mirando la puerta, ya no quer�a entrar en palacio tanto como antes, pero Alan se le adelant� sin decir ni mu y abri� la puerta. Cuando llegaron a la sala del trono se encontraron con que Grey y Midna estaban hablando y Galileo estaba en un sitio apartado haciendo una especie de escrito. Midna se fij� en las dos espadas que Link llevaba y se pregunt� si habr�a cogido otra, Grey reconoci� al instante una de ellas.



-�Esa es la espada maestra!-exclam� Grey sorprendido por primera vez-.

-No. No lo es-replic� Link en voz baja-.

-Por supuesto que no lo es-ahora era Galileo el que hablaba-esa es la Darkness Sword-.

-�Seguro? Yo ya vi eso en�-Midna se par�- tiene algo raro, no se que es-.

-Midna, f�jate en la empu�adura� los tri�ngulos son negros y no amarillos como en la trifuerza, �te acuerdas?

Midna se call� y examin� la espada justo en ese punto. No tard� en darse cuenta.

-Joven Grey� �C�mo sab�as que esa pod�a haber sido la espada maestra?-Pregunt� el viejo Galileo sin perder un detalle-.

Alan, Midna y Link centraron sus miradas en �l. Grey comprendi� por primera vez en su visita a ese mundo que hab�a metido la pata.

-Pues� la vi en un sitio. En un sitio de donde vengo� no puedo hablar de eso. Si quer�is mi ayuda tendr�is que confiar en mi.

Ninguno confi� demasiado, pero comprendiendo que no estaban en condiciones de �regatear� porque las visiones de Grey les indicaban cada cosa, no dijeron nada. Ahora lo primero era usar la Darkness Sword para volver a Hyrule� �a donde los vivos�, pens� Link. Entonces se le ocurri� la pregunta del mill�n.

-�C�mo vuelvo?

-Querr�s decir como volvemos-rectific� Midna.

-Nunca eh estado en el mundo de los vivos� y no conf�o en ellos-aclar� Alan cortante-.

-Nadie te pide que vengas-respondi� Link malhumorado-.

De no ser porque era un chico solitario y sombr�o, todos los presentes en la sala habr�an afirmado ver una peque�a muestra de decepci�n, tristeza y desilusi�n en el rostro de Alan. Link se di� algo de cuenta y se sinti� algo culpable.

-Entonces no hay m�s de que hablar. Me voy, no quiero ninguna rupia Link� ya que no eh acabado mi trabajo.

Alan sali� de la sala pero a nadie pareci� importarle. A nadie menos a Link. No pod�a creerlo. Alan se acababa de ir y seguramente no lo volver�a a ver� al fin y al cabo, �Qu� esperaba? Solo era una especie de chaval vagabundo que hab�a aceptado acompa�arle por dinero. Link lo hab�a pasado bien durante los dos d�as de descanso que hab�an estado alojados en el castillo gracias a Midna, pero solo era un descanso. Alan se hab�a ido y Link no quer�a pensar que no volver�a a verle, no se, le fastidiaba. Nadie dijo nada al respecto y m�s tarde Galileo les explico que para volver con la Darkness Sword hab�a que alzarla y decir unas palabras en un antiguo lenguaje Hyliano, nada que ver con el actual.



*****



Galileo sosten�a la espada. Midna, Link y Grey miraban expectantes sin decir nada.

-Voy a decir unas palabras en Hyliano antiguo que activaran el peque�o hilo de poder sagrado que queda en esta arma-declar� Galileo con voz firme-.

A continuaci�n cerr� los ojos, elev� algo m�s la espada y empezo a decir algunas palabras incomprensibles. Cuando acab� y parec�a no haber cambiado nada, un peque�o destello azul rodeo los tri�ngulos negros de la espada. Galileo mir� a Link.

-Te toca, chico. Ahora debes decir lo mismo que acabo de decir yo pero en tu lenguaje normal. Tu eres el elegido, el peque�o poder tambi�n te necesita a ti para despertar. Rep�te conmigo.

Link agarr� la espada y la alz� a su vez. Galileo empez� a dictar.

-Una vez las diosas escribieron un destino�

-Una vez las diosas escribieron un destino�-repiti� Link-.

-Dec�a que el bien apresar�a a la oscuridad�

-Dec�a que el bien apresar�a a la oscuridad�

-Pero alguien pens� �No ser�a mejor darse la mano, como si fueran amigas?

-Pero alguien pens� �No ser�a mejor darse la mano, como si fueran amigas?

-Nadie hizo caso de eso, y las diosas cometieron un peque�o error�

-Nadie hizo caso de eso, y las diosas cometieron un peque�o error�

-Si vas a cruzar esta puerta, jugar�s con la vida y la muerte�

-Si vas a cruzar esta puerta, jugar�s con la vida y la muerte�

-La luz puede ser oscura, y la oscuridad clara a veces�

-La luz puede ser oscura, y la oscuridad clara a veces�-Link ya se estaba cansando-.

-Pero en el final de los finales se fundir�n en una sola cosa y puede que lo veas� o puede que para entonces ya hayas muerto. La puerta que vas a cruzar decidir� eso.

Link repiti� la �ltima frase con pesadumbre: era muy larga. Un gran destello azul ilumin� toda la sala y unas voces como fantasmales empezaron a recitar el texto a coro. Link se estremeci�.



�Una vez las diosas escribieron un destino�

Dec�a que el bien apresar�a a la oscuridad�

Pero alguien pens� �No ser�a mejor darse la mano, como si fueran amigas?

Nadie hizo caso de eso, y las diosas cometieron un peque�o error�

Si vas a cruzar esta puerta, jugar�s con la vida y la muerte�

La luz puede ser oscura, y la oscuridad clara a veces�

Pero en el final de los finales se fundir�n en una sola cosa. El mundo recibir� su castigo�



Siempre cantaban eso y se dejaban la �ltima estrofa, se inventaban otra corta en su lugar. Casi mejor, as� no cantar�an tanto, a Link no le gustaban esas voces. A continuaci�n todo pas� muy deprisa. De repente una brecha azul se abri� en mitad de la sala y Link vio un destello blanco. Ya no vio

nada m�s, tampoco record� nada. Acababa de perder el sentido totalmente, y parec�a estar so�ando.
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